¡Hola, Barry, Michelle y todos los demás participantes en los grupos de DARE!
Hace mucho tiempo que quería escribir mi historia y una carta de agradecimiento para Barry. No estoy seguro de poder expresar con palabras la profunda gratitud que siento por este libro, los audios, los grupos de Facebook y los desafíos.
Decir que ha cambiado mi vida es la mayor subestimación. Estoy dispuesta a hacer todo lo que pueda para ayudar a alguien más, alentarlos en su propio viaje.
Mi historia comienza en la infancia, desde que tengo memoria he sido una persona ansiosa y nerviosa.
Crecí en un hogar con un padre alcohólico y a los 5 años aprendí que la vida era como caminar constantemente sobre el filo de una navaja. Todo era de temer y lo mejor era guardar silencio y mantenerse con la guardia baja para evitar problemas (lo que, por supuesto, nunca funcionó). Fui intimidada en la escuela, nada como algunas de las historias que he escuchado, pero aún así aterrador. A los 11 años comencé a herirme y a los 14 comencé a fumar marihuana constantemente y así fue durante 8 años.
Me estoy saltando algunos eventos importantes que sucedieron, como accidentes automovilísticos muy graves, amistades y relaciones tóxicas, etc., pero espero que entiendas la idea. Siempre estaba buscando un escape a mis sentimientos y emociones.
Aprendí temprano que externalizar cualquier emoción en voz alta era causa de problemas: aprendí que lo mejor era nunca expresar enojo, no llorar, la felicidad estaba bien siempre que no sea demasiado exuberante. Básicamente, aprendí a guardarme todo lo más profundo posible y fingir que no estaba allí.
A los 23 encontré a Dios y los malos hábitos más obvios se detuvieron por completo, no más drogas ni fiestas en su mayor parte y, ciertamente, dejé de autolesionarme. Pero nunca había abordado los problemas en mi infancia, la prisión emocional en la que permanecía y, por supuesto, sin mis mecanismos de escape, la ansiedad volvió. Tenía un ataque de pánico al azar aquí y allá, pero nunca se convirtió en un trastorno.
Haciendo un salto temporal hasta los 34 años, me casé y 3 años después de nuestro matrimonio, mi padre biológico falleció y esto me hizo caer en picada, estábamos muy unidos y perderlo fue como si el suelo se desmoronara.
La ansiedad más extrema de todas volvió y recurrí a la medicación para escapar. Hago otro salto temporal de 2 años más y finalmente tuve un gran “colapso”, al menos así lo llamo. Pánico severo y ansiedad como nunca había experimentado en mi vida. Tanto es así que pensé que finalmente había tocado fondo y estaba perdiendo la cabeza.
Esto continuó con ataques de pánico diarios durante semanas y entre eso hubo un constante zumbido de ansiedad severa. De hecho, un día perdí algo de visión durante unos minutos debido a los altos niveles de ansiedad.
Fui a médicos, viajes a la sala de emergencias, asesoramiento, nadie podía decirme qué estaba mal y por qué estaba sucediendo. “Es solo ansiedad, toma estos 5 medicamentos todo el día, todos los días y estarás bien”. Medicamentos altamente adictivos y que alteran el estado de ánimo, lo cual muestra lo poco que los médicos generales del mundo saben o se preocupan por saber sobre la ansiedad.
Incluso le rogué a mi esposo que me internara en un hospital porque simplemente no sabía qué hacer.
Él se negó y fue entonces cuando comencé a investigar en Internet como todos terminamos haciendo en algún momento.
Encontré un libro muy útil de la Dra. Claire Weekes, el cual me dio algo de esperanza, pero este libro fue escrito en los años 60 y estaba desactualizado y me resultó difícil ponerlo en práctica. Sin embargo, fue la motivación que necesitaba para seguir buscando y fue entonces cuando encontré la respuesta: The DARE, de Barry.
En su libro encontré mi historia narrada tal cual me sucedió a mí, todos mis síntomas, el motivo de mi angustia y las soluciones a mis problemas.
Recuerdo haber llorado de alivio cuando leí el primer capítulo. Lentamente comencé a poner en práctica los pasos de Dare.
Fue dolorosamente lento al principio; todos queremos sentir alivio instantáneo y en ese momento yo no podía salir de casa. Pero seguí leyendo el libro una y otra vez. Empecé a escribir en mi diario todos los días y finalmente llegó un día en el que fui lo suficientemente valiente como para salir a mi porche trasero y sentarme al aire libre durante unos minutos.
Era la primera vez que salía de casa en semanas. Hice esto todos los días durante 3 días y luego, el cuarto, decidí esforzarme mucho y salí por la puerta principal.
Caminé casi una cuadra y regresé, increíblemente orgullosa pero aterrorizada. Empecé a hacer caminatas diarias y eventualmente viajes cortos a la tienda. Con el tiempo, mi confianza creció tanto que caminaba dos millas por la mañana y al menos una milla por la noche. Eliminé todo el azúcar, la nicotina y la cafeína y comencé a poner cosas buenas en mi cuerpo y mente.
No más películas de terror ni de crímenes, necesitaba purgar las cosas malas y llenar mi cuerpo y mi mente de todas las cosas buenas que pudiera.
Este paso solo hizo una gran diferencia, no tenía idea de toda la basura negativa que estaba consumiendo (física y mentalmente) hasta que lo eliminé. (Como nota al margen, todavía ME ENCANTAN las películas de terror y los crímenes reales, pero limito la cantidad que miro porque soy una persona muy sensible. Es lo que funciona para mí)
Ahora puedo hacer viajes más largos y finalmente comencé a ver amigos nuevamente, volví a la Iglesia los domingos, a ir a la oficina en lugar de trabajar desde casa. Siempre desafiando mi pequeño corazón. Recuerdo mi primer viaje al cine; Tenía tanto miedo de estar atrapada en un cine durante 2 horas, pero me encantó y estaba muy orgullosa de todo lo que había logrado.
Al usar DARE dentro de los seis meses posteriores a mi “colapso”, hice un viaje a Francia durante 2 semanas. No puedo decirles cuán severa fue la ansiedad anticipatoria, pero estoy segura de que cualquiera que lea esto lo entenderá. ¡¡¡ME ATREVÍ a llegar a la CIMA DE LA TORRE EIFFEL!!!
Todavía no puedo creer la gran valentía de todo lo que hice mientras estuve allí. Incluso visitamos las catacumbas que, para que conste, tienen 8 pisos bajo tierra y luego 2.5 millas de paredes de calaveras y caminos en un ambiente similar a una cueva. Fue aterrador y estaba absolutamente asustada, pero también pasé el mejor momento de mi vida.
Estaba tan orgullosa de mí misma y de todo lo que descubrí que podía hacer mientras aún tenía miedo. La confianza construida durante ese viaje no tuvo precio.
Aquí viene la historia del retroceso. Un año y medio después de Francia, mi esposo y yo nos divorciamos y dos meses después del divorcio, mi amado gato (el único hijo que tuve) falleció. Él era mi corazón y había sido mi constante compañero y consuelo durante 12 años, me devastó.
Luego, dos meses después, mi dulce madrastra falleció de cáncer: Otro golpe devastador. Esto nos lleva al verano de 2019, cuando mi ansiedad y pánico volvieron a ser bastante brutales. Días familiares de sentir que perdería la cabeza, de irme a dormir con ansiedad, de despertarme con ansiedad.
Pero ahora es diferente, sé por qué me siento así. Estoy tratando de curarme de una vida de dolor que nunca me permití sentir. Estoy tratando de aprender a ser yo misma en un ambiente seguro, estable y feliz, y estoy aprendiendo a amarme finalmente después de 42 años.
No hace falta decir que la respuesta de Dare ha sido una compañera fiel, justo a mi lado este verano. Los grupos Dare han sido amigos amorosos y leales, alentándome y animándome todos los días aunque no lo sepan.
Los audios son una suave voz reconfortante a las 2 am cuando mi ansiedad es tan fuerte que no puedo dormir. La voz de Barry, la historia y el aliento de Suzane y la sabiduría de Michelle: todos ustedes han estado en este viaje conmigo, incluso si no lo saben. Saber que no estoy sola es el mejor regalo que me hicieron.
Enseñarme sobre mi cuerpo y lo que sucede a nivel biológico y químico no tiene precio, y compartir sus historias me ha dado coraje.
Si bien algunos pueden argumentar (incluyéndome a mí) que aún no estoy completamente recuperada de este gran contratiempo, siento que estoy muy cerca. Lo único que me ha enseñado mi ansiedad es que NUNCA me rindo. Incluso cuando finalmente me rendí durante un ataque de pánico bastante malo y dije: “Bien, si muero, muero.
¡Ya no me importa, estoy cansada de tener miedo de morir cuando no hay peligro!” Mi ansiedad me ha enseñado que NADIE puede impedirme vivir excepto yo, que el dolor, la pérdida insoportable, la felicidad, la tristeza, la ansiedad literalmente nada me impedirá vivir mi vida.
¡Qué hermosa revelación, y vino de tener miedo y ansiedad! No sé si alguna vez me habría dado cuenta de lo que estoy hecha, no había experimentado los puntos más bajos de mi vida y aun así me levanté, me sacudí y seguí adelante.
Tengo un viaje planeado para ir a Inglaterra por Navidad este año por 2 semanas con mi novio. Definitivamente ya estoy experimentando ansiedad anticipatoria a pesar de que faltan meses para el viaje, pero también estoy tan emocionada que apenas puedo esperar para ir y demostrarme a mí misma y al mundo nuevamente lo valiente que realmente soy.
Gracias desde el fondo de mi corazón por compartir con el resto de nosotros lo que has experimentado y cómo te recuperaste. Gracias por darnos esperanza cuando nadie más en la comunidad médica lo hizo. Mi objetivo es ayudar a los demás de la forma en que me has ayudado a mí.
Mi gran sueño es comprar tantas copias de DARE como pueda y comenzar a donarlas a las salas de emergencia de los hospitales y médicos generales en mi área con la esperanza de que llegue a las manos de un alma pobre como yo que no comprende lo que está atravesando y necesita ayuda, y conocer la verdad: que NO están locos y NO están solos.
¡No sé por dónde empezar, pero tengo una meta y realmente creo que este libro puede cambiar vidas!
La foto adjunta es desde el balcón de mi nuevo apartamento, después del final de mi matrimonio de 10 años el otoño pasado, nunca habría tenido el coraje de emprender la lucha por mi cuenta si nunca hubiera experimentado la peor ansiedad y atravesarla.. ¡Es una imagen de lo que creo que es mi mayor logro hasta la fecha!
Gracias nuevamente
Kelli